Yo tenía con quién
Sentarme a platicar
Diez mil tonteras
Yo tenía con quién
Sentarme a mirar
Un millón de estrellas
Yo tenía con quién
Sentarme a llorar
Mil horas enteras
Yo tenía con quién
Sentarme a soñar
Más de mil noches en vela
Yo tenía alguien con quien
El tiempo nunca me dejó
Sólo se detenía a un lado de nosotros
En cuanto ese alguien partía
El tiempo mío volaba siguiendo su sonrisa