Amendando
Me siento avergonzado
de tiempos que pasamos
ambos...como dos extraños
ahora en mi vida...madurando,
yo, me arrepiento de lo pasado.
Los años pasan sin preguntarnos,
lo que la vida nos ha enseñado.
los años pasan sin excusas,
de lo bueno o lo malo
aprendiendo de lo pasado.
En este puñado de días,
que hemos compartido y gozado,
hemos enmendado toda una vida,
que importan esos anos quebrados
no contemplo lo pasado.
Ahora con tu palpable espíritu,
reconosco tu valor...Padre,
sin fibra rencorosa, Te digo amigo!
Te tengo en mi alma
estoy hablando contigo!
Rolando Matias- Junio 12, 2000