Necesitas una mano guia
que apoye tus decisiones indecisas
y que te acompane en el camino
que a tu puerta se aproxima.
Necesitas una senal independiente
que sola senale tu futuro
no necesitas enemigos permanentes
no quieres a tu presencia de luto.
Necesitas a alguien de blanco
que ilumine tu oscuridad viviente
que haga transparente tu vida negra
y que reproche tus excusas pertinentes.
Necesitas a Dios
y ya lo tienes.