El nombre de alguien escuché de tus labios
y solo sé que no era el mيo.
Ese nombre que a veces se te hace amargo
y con el tiempo se te ha olvidado por qué.
Ese nombre que pronuncias sin darte cuenta
pues la costumbre puede mلs de lo que crees.
Ese nombre que no dejarل de ser
una palabra permanente en tu vocabulario
por que un diccionario con ese nombre llegaste a hacer.
Letras que no hacen importante a ese nombre
pues es el nombre que hace que las letras importen.
El nombre de alguien escuché de tus labios
y solo sé que no era el mيo.
Y aunque no era el mيo, tendré que vivir con el
aceptarlo, suspirarlo y aprender a pronunciarlo
por que llegَ primero que yo.
Pero no por eso dejaré que mi nombre
pase a ser un segundo nombre.
Ninguna letra le gana a su propio abecedario.
Sَlo se conjugarلn diferente de ahora en adelante.
Eso es todo.
Aprende a interpretarlo.