Por mلs que toco a las puertas de la ilusiَn
no logro contestaciَn.
Puertas que,
sin avisar se cerraron
y ahora vivo la humillaciَn del mismo dolor.
Dolor que se rيe de mi ser,
angustiado y débil,
sin ganas de seguir volando
a un nuevo encuentro.
Ser que vive refugiado
en la esquina del dolor y del sufrimiento.
Ser que embriaga su mente con agua de sudor,
sudor de angustia por mi inْtil corazَn.
Corazَn que no tiene memoria
por que la desactivَ en un momento
sَlo para no pensar
en la Ausencia
del Recuerdo.