Siento tus labios y no me has besado;
eres mيo y no te he tenido.
A muchas personas he despreciado
por tu amor inexistente, lleno de vacيo.
Caricias que, sin tu sentir, te he entregado;
cuerpo que, sin ser tocado, lo siento mيo.
No te pertenezco y me has engaٌado
pues, lamentablemente, no sabes que existo.
Y aunque viva despechada, seguiré esperando
hasta que algْn dيa no seas capricho.